Matt y Mariela se conocieron en un café de Nueva York en un día frío de invierno. Matt estaba leyendo un libro sobre historia y Mariela estaba trabajando en su computadora portátil. Matt no pudo resistir preguntarle a Mariela qué estaba haciendo en su computadora. Mariela, sorprendida, respondió que estaba trabajando en un proyecto de diseño gráfico. Matt y Mariela comenzaron a hablar y rápidamente descubrieron que compartían intereses similares. Específicamente, ambos eran apasionados por la música clásica. Matt le preguntó a Mariela si alguna vez había asistido a un concierto de la Filarmónica de Nueva York. Mariela, emocionada, respondió que no, pero siempre había querido ir. Matt sugirió que la llevaría al próximo concierto que tuviera boletos disponibles. Mariela aceptó la invitación y desde entonces, se han convertido en grandes amigos. Matt y Mariela asisten a muchos conciertos juntos y han descubierto muchas cosas nuevas y emocionantes en la ciudad de Nueva York. Son tan buenos amigos que incluso comenzaron a trabajar juntos en algunos proyectos de diseño gráfico. Un encuentro casual en un café de la ciudad terminó siendo el comienzo de una estrecha amistad.
