Un día soleado en Los Ángeles, Christine Crokos estaba caminando por la calle cuando escuchó la voz de Mel B. Cantaba en una iglesia cercana y Christine quedó cautivada por su voz. Se acercó a la iglesia y después del servicio se presentó con Mel B. Le dijo que admiraba su talento y que estaba interesada en trabajar en algo juntas. Mel B asintió con la cabeza y le dijo que estaba trabajando en algunas canciones nuevas que podrían trabajar juntas. Desde entonces quedaron para trabajar juntas todas las semanas y desarrollar aún más su visión artística. Así nació la colaboración creativa entre Christine Crokos y Mel B Musician.