Michael Pitt y Sei Ashina tuvieron una relación profesional en la película "Ghost in the Shell: El alma de la máquina" de 2017. Pitt interpretó al personaje principal, Kuze, mientras que Ashina interpretó a la geisha Saito. No hay evidencia de que hayan tenido una relación personal fuera del set de filmación. Ambos actores se mantienen relativamente privados sobre su vida personal, por lo que no hay ninguna información pública que indique que hayan estado juntos en algún momento.