Ilona Massey y Michael Whelan se conocieron en un museo de arte donde ambos estaban asistiendo a una muestra. Ilona estaba admirando una pintura de estilo surrealista cuando Michael se acercó para ver la misma obra. Al notar que Ilona estaba interesada en el arte, comenzaron a conversar sobre diferentes artistas y estilos. La conversación se extendió por varias horas y descubrieron que compartían muchos intereses en común. Ilona quedó impresionada por el talento de Michael y le pidió que le enseñara algunas técnicas de pintura. Michael estuvo encantado de compartir sus conocimientos y comenzaron a planear una sesión de pintura juntos. Después de la sesión, Ilona y Michael siguieron viéndose y compartiendo su amor por el arte. Pronto se dieron cuenta de que también había una química especial entre ellos y comenzaron una relación amorosa que se ha mantenido fuerte a lo largo de los años.
