Dora y Venter se conocieron en un viaje a la montaña, cuando ambos tuvieron un problema con su tienda de campaña y decidieron unir fuerzas para armarla. En ese mismo lugar, también conocieron a Michelle y Wild, quienes estaban acampando en la tienda de al lado. A pesar de las diferencias culturales y lingüísticas, las cuatro personas se llevaron muy bien y comenzaron a compartir experiencias y momentos divertidos durante su estadía en la montaña. Después de ese encuentro, siguieron manteniendo contacto y se convirtieron en grandes amigos.