Barbara Payton era una actriz estadounidense de cine y televisión que alcanzó cierta fama en la década de 1950. En su corta carrera, Payton se ganó la reputación de ser una mujer muy hermosa y también muy inestable. Su carrera comenzó a declinar después de que se viera involucrada en una serie de escándalos públicos, incluyendo su relación con el notorio gángster Mickey Cohen. Mickey Cohen era un gángster de la época que se dedicaba al crimen organizado en la ciudad de Los Ángeles. Cohen se convirtió en el jefe de la mafia judía de la ciudad y logró acumular una gran fortuna gracias a sus actividades delictivas. Cohen era conocido por su estilo de vida extravagante y por sus frecuentes conexiones con celebridades y personas influyentes. La relación entre Payton y Cohen comenzó en la década de 1950, mientras que Payton aún estaba en la cima de su carrera como actriz. La actriz comenzó a frecuentar los lugares que eran frecuentados por los gángsters y empezó a salir con Cohen. La relación fue muy turbulenta, y rápidamente se vio envuelta en escándalos públicos y en problemas relacionados con el alcohol y las drogas. La relación entre Payton y Cohen no duró mucho tiempo, pero tuvo un impacto significativo en la carrera de la actriz. Después de su relación con Cohen, Payton comenzó a ser vista como alguien que estaba dispuesto a vender su alma al diablo con tal de conseguir fama y dinero. La actriz comenzó a tener problemas en los estudios de cine y su carrera empezó a declinar drásticamente. En los años siguientes, la vida de Payton se convirtió en una serie de desgracias. La actriz estuvo involucrada en relaciones con varios hombres peligrosos, tuvo problemas con el abuso de sustancias y terminó en la calle. Payton murió a la edad de 39 años en 1967, en circunstancias muy tristes y solitarias.