Jennifer y Miguel se conocieron en un campo de verano en la costa del Pacífico. El día en que llegaron, ambos estaban nerviosos por conocer a nuevas personas y hacer amigos. Jennifer estaba sentada junto a la piscina cuando Miguel llegó. Él no pudo evitar mirarla, y después de un momento de duda, decidió acercarse. Él le habló sobre su amor por la música y ella compartió su pasión por los viajes. Durante toda la semana, se mantuvieron en contacto, pasando la mayor parte del tiempo juntos. Hicieron caminatas por la playa, disfrutaron de las fogatas por la noche y, una noche, incluso se aventuraron a bailar juntos en una discoteca local. Cuando el campo de verano terminó, Miguel y Jennifer intercambiaron números de teléfono y direcciones de correo electrónico. Prometieron mantenerse en contacto. Y así lo hicieron. A través de los años han escrito miles de correos electrónicos, llamadas telefónicas y cartas. Aunque la distancia que los separó en el principio les asustaba, pero ahoran están juntos y el amor que se tiene es muy fuerte.
