Un día soleado en la aldea de Konoha, Minato Namikaze, el Cuarto Hokage de la aldea, estaba corriendo por los campos de entrenamiento. Mientras tanto, Rainer Maria Wittenauer, un joven ninja de la aldea, estaba practicando sus habilidades de jutsu de agua en el río cercano. De repente, Rainer notó que alguien lo observaba desde la otra orilla del río. Al mirar hacia allí, vio a Minato corriendo hacia él a gran velocidad. Rainer se preparó para luchar, pero Minato simplemente detuvo a su lado y sonrió. "¡Hola! Soy Minato, el Hokage de Konoha. ¿Cómo te llamas?", preguntó Minato con entusiasmo. "Me llamo Rainer. ¿Y usted?", respondió Rainer, sorprendido por la amabilidad del Hokage. "Ya te lo dije, soy Minato", dijo Minato riendo. "Me gusta correr por aquí para mantenerme en forma, pero siempre es bueno conocer a otros ninjas de mi aldea. ¿Te gustaría entrenar juntos algún día?" Desde ese día en adelante, Minato y Rainer se convirtieron en amigos y compañeros de entrenamiento regulares. Juntos, fueron conocidos por su gran habilidad en el combate y por su profundo respeto por el otro como ninja y amigo. Nunca olvidarían el día en que se conocieron en la orilla del río, como dos chicos ordinarios, destinados a hacer cosas extraordinarias juntos.
