Ken-Miller y Molly-Bee se conocieron en una fría noche en un bar de la ciudad. Los dos se encontraron en la barra, y después de pedir un trago, comenzaron a hablar. Ken-Miller estaba fascinado por la personalidad extrovertida de Molly-Bee, mientras que ella estaba cautivada por el misterio que rodeaba a Ken-Miller. Hablaron durante horas, riendo y compartiendo historias. Descubrieron que tenían mucho en común, incluyendo su amor por la música y su pasión por los viajes. Ken-Miller y Molly-Bee decidieron continuar la noche en otro lugar, y pasaron el resto de la noche caminando por las calles de la ciudad, charlando y riendo juntos. Después de esa noche, Ken-Miller y Molly-Bee estaban inseparables. Se fueron de viaje juntos, explorando nuevos lugares y experimentando todo lo que la vida tenía que ofrecer. Fueron amigos durante años, hasta que finalmente se dieron cuenta de que eran mucho más que amigos. Y así, comenzaron una encantadora historia de amor juntos.
