Jasmine-Rouge y Monica-Sweetheart se conocieron en una fiesta en Praga. Jasmine estaba en la pista de baile, bailando al ritmo de la música electrónica, cuando Monica se le acercó y le pidió que bailara con ella. Jasmine aceptó, y así comenzó una noche llena de risas, baile y conversaciones interesantes. Durante la noche, descubrieron que tenían muchas cosas en común, incluyendo su pasión por el cine francés y su amor por la comida italiana. Hablaron sobre sus planes de viaje futuros y descubrieron que ambas habían soñado con visitar la Gran Muralla China desde que eran niñas. Después de la fiesta, Jasmine y Monica intercambiaron números y prometieron mantenerse en contacto. Desde entonces, han hecho muchos viajes juntas y han mantenido una amistad cercana y duradera. Gracias a esa noche en Praga, Jasmine y Monica encontraron a una amiga para toda la vida.
