Jordan y Nany se conocieron de una manera inesperada. Los dos visitaban la misma galería de arte durante el mismo día y en el mismo momento, pero nunca antes se habían visto. Casualmente, los dos se quedaron mirando la misma pintura y en ese momento se dieron cuenta de que compartían el mismo gusto por el arte y la cultura. Empezaron a hablar y descubrieron que tenían muchas cosas en común. Desde entonces, Jordan y Nany se hicieron inseparables y su amor creció día a día. Ahora, se han convertido en una pareja feliz y enamorada, y siempre recuerdan con cariño aquel día en la galería.
