Napoleón Bonaparte tuvo una relación con Albine de Montholon, quien era la esposa del oficial francés Charles de Montholon. Napoleón y Albine se conocieron en la isla de Santa Elena, donde el exiliado líder francés pasó sus últimos años. Durante su tiempo juntos, la relación entre Napoleón y Albine fue motivo de controversia y especulación, ya que algunos sugirieron que había una relación romántica entre ellos. Sin embargo, no hay pruebas definitivas que confirmen esta teoría. Se sabe que Albine era una de las pocas personas que disfrutaba de la confianza y la cercanía de Napoleón en Santa Elena. A menudo se la consideraba su confidente y compañera en los largos paseos por los jardines de la casa donde residía el exiliado líder. Después de la muerte de Napoleón, Albine regresó a Francia con su marido y murió en 1848. A pesar de la especulación sobre su relación con Napoleón, nunca se ha establecido con certeza cuál fue la verdadera naturaleza de su relación.
