En una noche de verano, Carlina-Toscano y Nazareno-Casero coincidieron en un pequeño bar en el centro de la ciudad. Ambos estaban ahí para escapar de sus rutinas diarias y disfrutar de una cerveza fría. Se sentaron en la misma mesa, pero parecían ignorarse mutuamente. Fue hasta que una canción romántica comenzó a sonar en el bar que sus miradas se cruzaron por primera vez y sintieron que había una conexión especial entre ellos. Coincidieron en que la melodía les recordaba a un momento especial en sus vidas y comenzaron a compartir historias y risas. El tiempo pasó volando y se dieron cuenta de que habían estado hablando toda la noche, lo que pareció ser un minuto. Intercambiaron números de teléfono y decidieron tener una segunda cita. Desde entonces, Carlina-Toscano y Nazareno-Casero han sido inseparables y han construido muchas memorias juntos. Su encuentro casual en el bar resultó ser el comienzo de una hermosa historia de amor.