Jessica y Nicholas se conocieron en una fiesta en la playa en Los Ángeles. Nicholas estaba tocando la guitarra y Jessica se acercó a él para pedirle que tocara una canción de su banda favorita. A partir de ahí, comenzaron a hablar y descubrieron que tenían muchas cosas en común, incluyendo su amor por la música y la naturaleza. Pasaron toda la noche hablando y divirtiéndose y no se separaron desde entonces. Desde entonces, se han convertido en inseparables y disfrutan explorando el mundo juntos y compartiendo su amor por la aventura.