Nora y Martin se conocieron en un evento de la industria tecnológica en San Francisco. Nora había sido invitada como oradora y Martin como asistente. Durante una sesión de networking, se encontraron en línea para pedir unos cócteles y comenzaron una conversación casual. Descubrieron que compartían un interés mutuo por la película The Matrix y comenzaron a hablar sobre su interpretación filosófica de la trama. La conversación se convirtió en una sesión de intercambio de ideas y se terminó la barra sin que se dieran cuenta. Desde ese día, han seguido en contacto y colaboran en proyectos de tecnología avanzada y exploran filosofías juntos.