Un día en una cafetería, Harry estaba leyendo un libro sobre astronomía mientras que Patricia pedía un té. Al pasar al lado de Harry, ella notó el libro que tenía en la mano y no pudo evitar preguntarle sobre eso. Harry le contó sobre su gran interés en el tema y pronto comenzaron a hablar sobre sus intereses compartidos. Descubrieron que, además de la astronomía, también disfrutaban de la fotografía y del cine clásico. Después de una larga charla, intercambiaron números de teléfono y se prometieron encontrarse de nuevo para ver el último éxito de taquilla juntos. Después de algunos años, se convirtieron en los más grandes amigos y comenzaron a emprender negocios juntos en el campo de la tecnología. Desde entonces han creado una compañía próspera y han seguido compartiendo su pasión por la astronomía.
