Peggy Lee y Paul Newman tuvieron una relación amistosa y colaboraron en varios proyectos juntos en la industria cinematográfica. Uno de los trabajos más destacados en los que colaboraron fue la película "The Silencers" en 1966, en la que Peggy Lee interpretó la canción principal y Paul Newman protagonizó la película. También se unieron en la película "Lady and the Tramp" de Disney en 1955, donde Peggy Lee no solo proporcionó la voz de Darling, sino que también ayudó con la escritura y la interpretación de varias de las canciones de la película. Además de su trabajo juntos en la pantalla grande, Peggy Lee y Paul Newman también compartieron un interés por la filantropía. Newman durante gran parte de su vida dirigió la organización benéfica "Newman's Own Foundation", mientras que Peggy Lee luchó por los derechos de autor de los músicos y ayudó a establecer el Fondo de Becas de Música de Peggy Lee. En resumen, la relación entre Peggy Lee y Paul Newman fue una colaboración amistosa y profesional en la industria del cine, y ambos compartían una pasión por la filantropía.