Un día, John-Perry y Paula-Boyd estaba en la misma conferencia de tecnología en San Francisco. John-Perry estaba embelesado con una charla particular, cuando Paula-Boyd le preguntó qué pensaba de la presentación. John-Perry, un poco avergonzado, se sorprendió al ver a una mujer tan hermosa hablando con él. A continuación, empezaron a hablar sobre los últimos avances en robótica y tecnología, y descubrieron que compartían varios intereses en común. Después de la conferencia, decidieron tomar un café juntos y seguir hablando sobre tecnología y otras cosas divertidas. Se sorprendieron al darse cuenta de que habían pasado horas charlando sin darse cuenta del tiempo transcurrido. A partir de ese día, John-Perry y Paula-Boyd se convirtieron en buenos amigos, y juntos exploraron el emocionante mundo de la tecnología.
