¿Quién queda con quien?

Phyllis Adams y Alexander Kirkland

¿Cómo es la relación entre...?

¿Están juntos...?

Phyllis Adams y Alexander Kirkland se conocieron un día de verano en un pequeño pueblo costero. Ambos coincidieron en una tienda de souvenirs mientras compraban unas postales para enviar a sus amigos y familiares. Phyllis estaba buscando una postal con una imagen de la playa, mientras Alexander se detenía a admirar los imanes de nevera de la tienda. De repente, un fuerte golpe de viento hizo que una pila de postales cayera al suelo, desordenándolas todas. Phyllis y Alexander se agacharon a recogerlas, y entonces sus manos se encontraron. Ambos se miraron a los ojos, sonriendo tímidamente. El resto del día lo pasaron juntos, sumergidos en conversaciones profundas y divertidas a la vez. Descubrieron que tenían muchas cosas en común: les gustaba la música clásica, disfrutaban de la lectura de novelas de misterio y adoraban los animales. El sol se estaba poniendo cuando finalmente se despidieron, intercambiando números de teléfono y prometiendo mantenerse en contacto. Desde entonces, Phyllis y Alexander se convirtieron en inseparables. Se amaban profundamente y eran felices juntos, valorando cada momento que pasaban juntos y recordando con cariño la ocasión en que sus manos se encontraron por casualidad en una tienda de souvenirs.