Prince William Windsor y Bryony Daniels se conocieron un día soleado en Londres. Mientras caminaban por la ciudad, sus miradas se encontraron y se detuvieron por un momento. Fue como si el tiempo se hubiera detenido. Después de unos segundos, continuaron caminando, pero su encuentro había dejado una huella en cada uno de ellos. Poco tiempo después, Bryony asistió a una cena de gala en el Palacio de Buckingham y se sorprendió al ver a William en la misma sala. Después de la cena, fueron presentados y se dieron cuenta de que el destino los había reunido de nuevo. Él la invitó a bailar y mientras se mecían al son de la música, se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común. A partir de ese día, comenzaron a salir y a conocerse mejor. Descubrieron que compartían una pasión por el arte y la música y que tenían muchos ideales similares en la vida. Fue como si hubieran sido destinados a encontrarse. Eventualmente, Prince William le propuso matrimonio a Bryony en el mismo lugar donde se habían conocido por primera vez, y ella aceptó emocionada. Desde entonces, han sido una pareja feliz y se apoyan mutuamente en todo momento. El destino, sin duda, tenía grandes planes para ellos.
