George Sand y Prosper Mérimée tuvieron una relación amorosa y literaria durante varios años a mediados del siglo XIX en Francia. Sand era una escritora famosa y reconocida, mientras que Mérimée era un dramaturgo e historiador. Se conocieron en 1833 y comenzaron una relación amorosa que duró hasta 1835. Durante este tiempo, intercambiaron cartas apasionadas y colaboraron en varias obras literarias. También viajaron juntos a España, donde Mérimée estaba trabajando en una misión diplomática. Sin embargo, su relación no duró mucho tiempo debido a las diferencias culturales y de personalidad. Sand era una mujer independiente y luchadora por los derechos de las mujeres, mientras que Mérimée era más conservador y tradicional. A pesar de su ruptura, Sand y Mérimée siguieron siendo amigos y colaboraron en algunos proyectos literarios en los años siguientes. Su relación sigue siendo una de las más interesantes e influyentes en la historia de la literatura francesa.
