Un día soleado en la playa, Rachel estaba caminando por la arena cuando notó a un joven de aspecto atlético que venía corriendo hacia ella. Era Jermain Defoe, que había estado entrenando en la playa esa mañana. Se detuvo a hablar con Rachel y le preguntó si quería unirse a él para dar un paseo por la playa. Durante el paseo, Jermain y Rachel se conectaron y comenzaron a hablar de sus intereses y pasatiempos. Resultó que ambos eran fanáticos del fútbol y habían jugado desde niños. A medida que avanzaba el día, Jermain y Rachel se sintieron más cómodos el uno con el otro y comenzaron a reír y bromear juntos. Finalmente, Jermain le pidió a Rachel que saliera con él esa noche para ir a bailar. Rachel aceptó y pasaron una noche increíble juntos, bailando toda la noche y hablando de todo, desde la música hasta el fútbol. A partir de esa noche, Jermain y Rachel se convirtieron en inseparables y comenzaron una relación que ha durado muchos años. Ahora, como pareja, Jermain y Rachel han construido una vida juntos basada en su amor mutuo y su pasión por el fútbol.