Warren Beatty y Raquel Welch tuvieron una relación en la década de 1960 que fue brevemente documentada por los medios de comunicación. Beatty y Welch se conocieron en el set de la película de 1967 "Bonnie and Clyde", en la que Beatty había sido elegido para interpretar al ladrón de bancos Clyde Barrow y Welch tenía un pequeño papel como la esposa de uno de los personajes secundarios. Según los informes de la época, su romance comenzó poco después de conocerse en el set y duró varios meses antes de terminar abruptamente. Los detalles sobre la ruptura son escasos, pero se ha sugerido que la agenda de trabajo ocupada de Beatty pudo haber sido un factor en la separación. Curiosamente, Welch no habló mucho de su relación con Beatty en sus memorias publicadas en 2010, en las que se centró principalmente en su carrera en Hollywood y su vida personal. Beatty, por su parte, ha mantenido una larga trayectoria de relaciones amorosas con actrices y modelos a lo largo de su carrera en el cine, incluyendo a Julie Christie, Joan Collins y Madonna.
