Tatiane-Rosalino estaba caminando por la plaza del centro cuando de repente escuchó un ruido fuerte, era un balón que había rebotado en un árbol y había golpeado su cabeza. Ella estaba aturdida y en ese momento apareció Rio-Ferdinand, quien preocupado la ayudó a levantarse. Después de asegurarse de que Tatiane-Rosalino estaba bien, Rio-Ferdinand se presentó y le preguntó si le gustaba el fútbol, a lo que ella respondió afirmativamente. Rio-Ferdinand quedó impresionado por su belleza y su conocimiento sobre el deporte, por lo que iniciaron una conversación amistosa. Después de hablar por un rato, Tatiane-Rosalino y Rio-Ferdinand intercambiaron números y prometieron seguir en contacto. Desde ese día, comenzaron a hablar y a conocerse cada vez más, hasta que finalmente se dieron cuenta de que habían encontrado a alguien especial en el otro. Así, Tatiane-Rosalino y Rio-Ferdinand comenzaron una hermosa relación basada en su amor por el fútbol y lo que habían aprendido el uno del otro.
