Michael Jordan y Robin Givens tuvieron una breve relación en la década de 1980. Givens era una actriz y modelo muy conocida en ese momento, mientras que Jordan estaba en ascenso en su carrera como jugador de baloncesto. Se dice que la relación entre Jordan y Givens no fue muy buena debido a la personalidad difícil de Givens. Durante una entrevista en 1990, ella describió a Jordan como un hombre "infantil" y "obsesivo". Además, en su autobiografía publicada en 2017, Jordan mencionó que Givens lo llamó llorando una vez, diciéndole que su padre había fallecido. Jordan inmediatamente canceló un partido para estar con ella, solo para descubrir más tarde que su padre todavía estaba vivo. A pesar de los rumores de mala relación, Jordan y Givens nunca hablaron públicamente sobre su relación ni han revelado ningún detalle sobre ella.
