Douglas Fairbanks Jr. y Rudi Crespi fueron amigos cercanos desde la infancia. Los dos se conocieron en la Escuela de San Marcos en California, donde se hicieron inseparables. Crespi era hijo de un inmigrante alemán que se había establecido en California y había conseguido hacer fortuna en el negocio de los productos agrícolas. La familia Crespi era conocida por su riqueza y su posición social, y Rudi se movía en círculos elitistas. Douglas y Rudi compartían una pasión por el cine desde temprana edad. Los dos pasaban horas viendo películas y discutiendo sobre actores y directores. Douglas había nacido en una familia de actores y estaba decidido a seguir los pasos de su padre, mientras que Rudi soñaba con producir películas. Los dos se apoyaban mutuamente en sus sueños y aspiraciones. Durante la década de 1930, Douglas se convirtió en una estrella de cine prominente y Rudi se estableció como uno de los productores más importantes de Hollywood. Los dos siguieron siendo amigos cercanos y colaboraron en varias películas, incluyendo "La Ronda de la Vida" (1937) y "Sin novedad en el frente" (1930). A medida que pasaban los años, Douglas y Rudi mantuvieron su amistad, pero se distanciaron un poco debido a sus respectivas carreras y compromisos. Sin embargo, la amistad entre los dos siempre fue fuerte y duradera. Cuando Rudi murió en 1966, Douglas fue uno de los pocos amigos cercanos que asistió a su funeral. La relación entre Douglas Fairbanks Jr. y Rudi Crespi fue una verdadera amistad en Hollywood, donde las verdaderas amistades son difíciles de encontrar.
