Carly-chaikin y Ryan-Bunnell se conocieron en un bar de Los Ángeles. Carly estaba buscando algo para beber cuando vio a Ryan en la barra y su corazón latió más rápido. Él la notó también y comenzaron a hablar. Descubrieron que tenían muchas cosas en común, desde gustos de música hasta pasatiempos, e intercambiaron números. Desde entonces, han sido inseparables y se apoyan mutuamente en sus carreras artísticas.