Sara y Dado se conocieron en un festival de música en la playa. Dado estaba con sus amigos, tomando unas cervezas y disfrutando de la música, cuando vio a Sara caminando por la arena. Era una noche de luna llena y Sara parecía una diosa con su vestido blanco y sus rizos dorados al viento. Dado, sin dudarlo, se acercó a Sara y le preguntó si quería tomar algo con él y sus amigos. Sara, que también estaba con sus amigas, aceptó encantada. Durante toda la noche, Dado y Sara se rieron, charlaron y bailaron juntos. Cuando llegó el fin del festival, ambos sentían que habían encontrado a alguien especial. Intercambiaron números de teléfono y se prometieron volver a verse pronto. Y así fue como comenzó su historia de amor, una noche de música, playa y magia.