Jimmy Butler y Shay Mitchell se conocieron de manera casual en una tienda de deportes. Jimmy estaba buscando unas zapatillas nuevas para el partido de la noche y Shay estaba comprando equipo para su entrenamiento de yoga. Ambos fueron a la misma sección y se encontraron frente a frente. Jimmy se sorprendió al ver a una famosa actriz allí, mientras que Shay se emocionó al conocer a uno de sus jugadores de baloncesto favoritos. Comenzaron a conversar y descubrieron que tenían muchas cosas en común: ambos eran amantes del deporte, trabajadores incansables y tenían un amor por la vida enérgico y apasionado. Desde ese día en adelante, se mantuvieron en contacto como buenos amigos, apoyándose mutuamente en sus carreras y compartiendo su amor por el deporte y el entretenimiento.
