Justina-Valentine y Sommer-Ray se conocieron en un gimnasio en Nueva Jersey. Ambas estaban haciendo ejercicio cuando Justina notó que Sommer estaba levantando más peso del que ella misma podía levantar. Impresionada, Justina se acercó a Sommer para felicitarla y comenzaron a hablar. Descubrieron que tenían mucho en común, como su amor por la música y su interés en la moda y el estilo de vida saludable. Después de intercambiar números de teléfono, comenzaron a frecuentarse y a entrenar juntas en el gimnasio. La amistad entre ellas se fortaleció con el tiempo y ahora son mejores amigas inseparables.