Un día, Hinata-Hyuga se encontraba paseando por un parque cuando de repente, se topó con Stephanie-Pickard, quien estaba sentada bajo un árbol leyendo un libro. Al verla, Hinata se quedó impresionada por la belleza de Stephanie y decidió acercarse para hablar con ella. Después de intercambiar algunas palabras, se dieron cuenta de que tenían muchas cosas en común. Ambas amaban el arte, la música y los animales. De repente, unos perros comenzaron a ladrar muy cerca de ellas y ambas se asustaron. Sin pensarlo dos veces, se tomaron de las manos y corrieron juntas hacia un lugar seguro. Fue en ese momento, mientras corrían de la mano, cuando Hinata-Hyuga y Stephanie-Pickard se dieron cuenta de que había nacido una amistad muy especial entre ellas.
