Un día, mientras Kushina Uzumaki estaba caminando por el parque, accidentalmente chocó con Stephanie Pickard, quien también disfrutaba de una tarde tranquila paseando por el lugar. Ambas mujeres se disculparon y comenzaron a conversar informalmente, descubriendo que tenían intereses similares en el arte y la literatura. Esa tarde, compartieron ideas y opiniones sobre sus obras favoritas, lo que llevó a una amistad repentina. Desde ese momento, Kushina y Stephanie comenzaron a pasar más tiempo juntas, asistiendo a exposiciones de arte, ferias de libros y festivales culturales. Su encuentro accidental se convirtió en el comienzo de una relación que duraría por mucho tiempo.