Neil se encontraba caminando por las calles de Los Ángeles, cuando de repente se topó con una mujer de belleza indescriptible, era Susan. Él quedó impresionado por su mirada y ella quedó cautivada por su voz. Neil comenzó a tocar su acústica para ella y juntos improvisaron una canción sobre la vida en la ciudad. Esa noche, mientras compartían una taza de café y contaban sus historias de vida, se dieron cuenta de que su amor por la música los uniría para siempre. Desde entonces, han seguido componiendo juntos, inspirándose tanto en la vida como en el amor que comparten. Su historia de amor y música es única y especial, y juntos han creado algunas de las canciones más hermosas que el mundo haya escuchado nunca.
