Nicholas Ray y Susan Ray mantuvieron una relación amorosa tumultuosa. Se conocieron en 1969, cuando ella era una estudiante de 19 años y él era un director de cine de renombre en sus cuarenta años. La pareja se enamoró rápidamente, pero la relación se vio afectada por la adicción de Nicholas al alcohol y las drogas, así como por sus deseos románticos por otras mujeres. En 1971, mientras trabajaba en el guión de su película "We Can't Go Home Again", Nicholas comenzó una relación con una de sus estudiantes en Binghamton, Nueva York. Cuando Susan se enteró de la infidelidad, se enfureció y decidió separarse de él. Sin embargo, dado que compartían el trabajo en la película, tuvieron que continuar trabajando juntos. Esta situación fue muy tensa y provocó problemas en la producción de la película. A pesar de los problemas, Nicholas y Susan mantuvieron una estrecha relación después de su ruptura. Nicholas siempre la consideró su musa creativa y trabajaron juntos en varios proyectos, como el documental "I'm a Stranger Here Myself", que Susan dirigió y en el que Nicholas actuó. En 1979, Nicholas murió de un ataque al corazón a los 67 años. Susan continuó manteniendo su legado y carrera cinematográfica durante los siguientes años, escribiendo libros y organizando exposiciones de arte en todo el mundo.
