Tayuya y Yahama-Batista se encontraron en una tienda de música. Tayuya estaba probando su flauta mientras Yahama-Batista miraba los instrumentos cercanos. Al escuchar Tayuya tocar, Yahama-Batista se acercó y le habló de su amor por la música y los instrumentos de viento. Tayuya quedó impresionada por la profundidad del conocimiento de Yahama-Batista y juntos comenzaron a hablar sobre la música y la vida. A partir de ese día, se convirtieron en grandes amigos y comenzaron a tocar música juntos. Su amor por la música los unió y desde entonces no han dejado de hacer música juntos.