En una tarde soleada, Marcos se encontraba caminando por las concurridas calles de la ciudad. De repente, vio a Palmeira sentada en un banco con una sonrisa en su rostro. Él se acercó y comenzaron a conversar. Mientras tanto, Vanessa estaba en un café cercano con una amiga. Al salir, notó a Barum sentado en una mesa cercana. Sus ojos se encontraron y ella decidió acercarse para saludarlo. Después de un tiempo hablando, decidieron unir sus dos conversaciones y continuar juntos. Desde aquel día, no se han separado y su amor ha ido creciendo cada día más.