Un día, Lili-Marlene y Vanessa-Del-Rio coincidieron en una tienda de antigüedades en el centro de la ciudad. Mientras examinaban una colección de vinilos, empezaron a hablar y descubrieron que ambas eran fans de la música clásica. Decidieron que debían encontrarse de nuevo y compartir una noche de concierto juntas. Después de ese evento, siguieron quedando regularmente para escuchar música, intercambiar libros y compartiéndose conocimientos. Con el tiempo, su amistad se convirtió en algo entrañable y se volvieron inseparables.