Gottfried-Schwetz y Victoria-Vetri se conocieron en una feria de arte contemporáneo en Berlín. Ambos estaban admirando una obra de arte abstracta cuando comenzaron a hablar. Descubrieron rápidamente que compartían un gran amor por la naturaleza y la filosofía. Gottfried-Schwetz se impresionó por la forma en que Victoria-Vetri hablaba sobre la interconexión entre el hombre y la naturaleza y su compromiso por vivir en armonía con el medio ambiente. Victoria-Vetri, por su parte, se sintió atraída por la pasión y la inteligencia de Gottfried-Schwetz. A partir de ese momento, comenzaron a salir juntos y a explorar su amor por la naturaleza. Juntos, descubrieron bosques y montañas remotos que los dejaron maravillados. Durante sus expediciones, también conversaron sobre la importancia de la colaboración y el trabajo en equipo, lo que les permitió fortalecer su relación cada vez más. Desde entonces, Gottfried-Schwetz y Victoria-Vetri se han convertido en inseparables, enamorados del arte y de la naturaleza.
