Diego y Yamila se conocieron en una cafetería en el centro de la ciudad. Diego estaba ahí tomando un café mientras trabajaba en su computadora, y Yamila entró en busca de un lugar para sentarse y estudiar para sus exámenes finales en la universidad. Los dos intercambiaron miradas y sonrisas al principio, pero no se hablaron durante un rato. Finalmente, Diego se acercó a Yamila y comenzó una conversación sobre sus planes para el futuro y su amor compartido por el café. La conversación fluyó fácilmente y rápidamente se dieron cuenta de que tenían mucho en común, desde sus intereses hasta su sentido del humor. Pasaron horas hablando y riendo juntos, prometiendo mantenerse en contacto y hacer planes para reunirse pronto. Después de esa primera reunión, Diego y Yamila se vieron regularmente, recorriendo diferentes cafés por la ciudad y explorando nuevas áreas juntos. Se convirtieron en buenos amigos y finalmente en pareja, apoyándose mutuamente en sus carreras y planes futuros. Años después, Diego y Yamila todavía disfrutan de pasar tiempo juntos en las cafeterías, recordando ese primer encuentro que cambió sus vidas para siempre.
