Danielle-Moinet y Yuhi-Kurenai se conocieron por casualidad en un evento de lucha libre en Japón. Ambas estaban programadas para luchar en el mismo combate y se encontraron en los vestidores antes del evento. Yuhi-Kurenai notó de inmediato la pasión y el entusiasmo de Danielle por la lucha libre y comenzaron una conversación animada sobre sus carreras en el ring. Descubrieron que tenían mucho en común y rápidamente se hicieron amigas. Desde ese día, Danielle y Yuhi nunca se apartaron el uno del otro, y se convirtieron en las mejores amigas y compañeras de lucha libre. A medida que su amistad crecía, también lo hacía su habilidad en el cuadrilátero, y comenzaron a ganar una gran cantidad de aficionados por su excelente desempeño en el ring. Hoy en día, Danielle y Yuhi son dos de las luchadoras más reconocidas y exitosas en la lucha libre profesional, y su amistad sigue siendo tan fuerte como cuando se conocieron por primera vez en aquel evento de lucha libre en Japón.