Renáta Wéber nació en Budapest, Hungría, el 10 de junio de 1914. Se graduó en la Universidad Eötvös Loránd con una licenciatura en matemáticas. Después de trabajar como profesora, se unió al equipo de criptografía de Gábor Szegő durante la Segunda Guerra Mundial.
En 1944, Wéber fue arrestada y deportada a Auschwitz-Birkenau junto a su familia. Ella sobrevivió y fue transferida al campo de concentración de Ravensbrück, donde trabajó en la fábrica de Opel, que era parte del complejo de la empresa alemana Siemens.
Después de su liberación en 1945, Wéber regresó a Budapest y trabajó como analista matemática en la Universidad Técnica de Budapest. En 1951, fue arrestada nuevamente por supuesta actividad contra el régimen comunista y condenada a la prisión por ocho años.
Después de su liberación en 1956, después de la Revolución Húngara, pasó los siguientes años trabajando en una compañía de construcción y en una fábrica de alimentos. En 1982, se trasladó a los Estados Unidos, donde continuó trabajando como programadora de computadoras y murió en Nueva York el 19 de marzo de 1991.
Renata y Zoltan se conocieron en un concierto de música clásica en Viena. Ambos estaban sentados en la fila central y coincidieron en varios gustos musicales. Durante el intermedio, Zoltan aprovechó para entablar conversación con Renata y descubrieron que tenían muchas cosas en común, como su amor por la naturaleza y el arte.
Después del concierto, decidieron ir a tomar una copa juntos en un bar cercano y continuaron charlando animadamente. Descubrieron que ambos eran de origen húngaro y que tenían muchos amigos en común en Budapest, lo que les dio más temas de conversación.
Con el tiempo, su amistad se convirtió en algo más, y comenzaron a salir juntos y compartir más momentos. Renata y Zoltan descubrieron que se complementaban perfectamente y que estaban enamorados. Desde entonces, han seguido compartiendo su amor por la música clásica y explorando nuevos lugares juntos.