Robert Palmer nació el 19 de enero de 1949 en Batley, Yorkshire, Inglaterra. Comenzó su carrera musical como cantante y guitarrista de la banda The Alan Bown Set en la década de 1960. En los años 70, lanzó su primer álbum en solitario, "Sneakin' Sally Through the Alley", el cual incluía partes de funk, soul y rock.
Fue su sencillo "Every Kinda People" que lo llevó al éxito internacional en 1978. Continuó lanzando éxitos comerciales en la década de 1980, como "Addicted to Love", "Simply Irresistible" y "I Didn't Mean to Turn You On".
Además de su exitosa carrera musical, Palmer también trabajó en la televisión y en el cine como actor y presentador. Participó en la película "Mothership Connection" de 1976 y en la serie de televisión "Miami Vice" en 1985.
Robert Palmer murió el 26 de septiembre de 2003 en París, Francia, a los 54 años de edad, debido a un ataque al corazón. Dejó un legado musical y sigue siendo reconocido como uno de los artistas más influyentes de su generación.
Mary Ambrose y Robert Palmer fueron una pareja durante muchos años, aunque nunca contrajeron matrimonio oficialmente. Ambrose era una modelo y actriz estadounidense, mientras que Palmer era un cantante, compositor y guitarrista británico.
Se conocieron en la década de 1970 y comenzaron una relación en la que compartieron muchos momentos importantes. Fueron una pareja inseparable y se vieron juntos en diversas ocasiones, como en algunos eventos de la industria musical o en sus apariciones públicas.
Sin embargo, en la década de 1990, la relación comenzó a deteriorarse y terminaron separándose. A pesar de ello, mantuvieron una amistad cercana hasta la trágica muerte de Palmer en 2003.
Ambrose fue una de las personas más afectadas por la pérdida de Palmer y realizó muchas declaraciones en su honor. Aunque nunca se casaron, la relación entre ellos fue importante y duradera, dejando una huella en la vida de ambos.
Geraldine Edwards y Robert Palmer tuvieron una relación amorosa en la década de 1970. Edwards fue modelo y actriz, y conoció a Palmer mientras trabajaba en películas como The Best Pair of Legs in the Business y Intimate Games. Según los informes, la pareja se enamoró rápidamente y comenzaron una relación.
En esa época, Palmer ya era un músico exitoso, conocido por canciones como "Johnny and Mary" y "Addicted to Love". Edwards compartió su pasión por la música y trabajó en estrecha colaboración con Palmer en su carrera. Apareció en algunos de sus videos musicales y también actuó como corista en algunos de sus conciertos.
Sin embargo, después de unos años juntos, la relación se volvió tumultuosa y finalmente se separaron. Según Edwards, ella dejó a Palmer después de que se volvió cada vez más distante y enfocado en su carrera musical. Después de la separación, Edwards continuó su carrera en la actuación y también trabajó como asistente personal para músicos como George Michael y Duran Duran.
Palmer, por otro lado, continuó su carrera musical, lanzando varios álbumes exitosos en las décadas de 1980 y 1990 antes de su muerte en 2003. A pesar del final amargo de su relación, Edwards todavía habla con cariño de Palmer y su tiempo juntos en la década de 1970.
No existe una relación conocida entre Susan Thatcher y Robert Palmer. Ambos son personalidades famosas en sus respectivos campos, con Thatcher siendo una escritora y educadora estadounidense y Palmer siendo un músico y cantante británico. No hay registros públicos de que hayan trabajado juntos o interactuado personalmente. Por lo tanto, podría concluirse que no existe una relación significativa entre ellos.
Betty Davis y Robert Palmer tuvieron una breve pero intensa relación en la década de 1970. Davis, conocida por ser una pionera del funk y una figura influyente en la música, se convirtió en una de las musas de Palmer antes de que él comenzara su carrera en solitario.
La pareja se conoció en un club de Nueva York en 1974 y rápidamente comenzaron una relación sentimental y musical. Davis produjo y coescribió varias canciones de Palmer, entre ellas "Sneakin' Sally Through the Alley" y "Pressure Drop". También fue el puente que unió a Palmer con la banda de funk de Davis, que colaboró en la grabación de varios discos de Palmer.
Sin embargo, la relación entre los dos músicos finalmente se deterioró debido a los problemas de adicción de Palmer y sus diferencias creativas. A pesar de ello, su colaboración musical dejó una huella indeleble en la música de la década de 1970 y más allá.
Robert-Palmer y Shelly-Putman se conocieron en una fiesta en la ciudad de Nueva York. Él estaba en el bar, tomando un trago de su whisky favorito, mientras que ella estaba en la pista de baile, moviéndose al ritmo de la música. Fue entonces cuando Robert-Palmer se acercó y le preguntó si quería bailar con él.
Shelly-Putman estaba un poco sorprendida pero aceptó, y rápidamente sintió la química entre ellos. Bailaron toda la noche, hablando de todo, desde música hasta trabajo. Descubrieron que tenían mucho en común y esa noche se convirtió en el comienzo de algo especial.
A partir de ese momento, Robert-Palmer y Shelly-Putman comenzaron a salir juntos con regularidad, disfrutando de conciertos en vivo, cenas elegantes y largas caminatas por la ciudad. Descubrieron que se complementaban el uno al otro perfectamente, y así continuaron disfrutando de su hermosa relación.
Penny-Lane y Robert-Palmer se conocieron en una cafetería en el centro de la ciudad. Se encontraron en la fila para pedir, y mientras esperaban comenzaron a conversar. Descubrieron que ambos eran fanáticos de las bandas de rock de los años 70 y rápidamente conectaron por su amor compartido por la música. Pasaron horas hablando y compartiendo recomendaciones de canciones y bandas. Eventualmente, intercambiaron números y comenzaron a salir juntos para asistir a conciertos y festivales de música. Desde entonces, han sido inseparables y han construido una relación basada en su amor por el rock clásico.