Romano Romanelli fue un escultor italiano nacido en la ciudad de Pistoia en 1852 y fallecido en Florencia en 1933. Estudió en la Academia de Bellas Artes de Florencia y completó su formación en París, en la École des Beaux-Arts.
A lo largo de su carrera, Romanelli realizó numerosas obras, tanto en Italia como en otros países, destacando especialmente por sus monumentos conmemorativos y sus retratos. Entre sus obras más significativas se encuentran el monumento a Víctor Manuel II en Florencia, el busto de Giuseppe Garibaldi en Pisa y la estatua de Dante Alighieri en el Memorial de Cavour en Turín.
Además, Romanelli fue profesor en la Academia de Bellas Artes de Florencia y dejó una gran influencia en la escultura italiana de la época, especialmente en lo que respecta al realismo y al detalle en la representación de la anatomía.
Isadora Duncan fue una bailarina estadounidense famosa por su forma innovadora y libre de bailar en la primera mitad del siglo XX. Romano Romanelli era un escultor italiano que se convirtió en un amigo cercano de Duncan en la década de 1910.
Romanelli y Duncan se conocieron en Florencia en 1910 cuando ella visitó su taller. La bailarina estaba fascinada por las esculturas de Romanelli y comenzaron una amistad cercana. Duncan posó para Romanelli en varias ocasiones y se convirtió en su musa.
Además de la amistad y la colaboración artística, también se rumoreaba que hubo una relación amorosa entre Duncan y Romanelli. Algunos incluso dicen que Romanelli fue el padre biológico de uno de los hijos de Duncan, aunque esto nunca se ha confirmado.
La relación entre Duncan y Romanelli se vio interrumpida por la Primera Guerra Mundial y la muerte trágica de la bailarina en 1927. A pesar de esto, la amistad y la colaboración artística entre estos dos artistas aún se recuerdan como una parte importante de su legado artístico.