Roxy Jacenko es una empresaria y autora australiana nacida en 1980. Es conocida por ser la directora de Sweaty Betty, una agencia de relaciones públicas con sede en Sydney. También es autora de varias novelas y ha aparecido en varios programas de televisión.
Jacenko comenzó su carrera en relaciones públicas después de graduarse de la universidad en Sydney. Trabajó para varias agencias antes de fundar su propia empresa, Sweaty Betty, en 2004. La agencia se especializa en la promoción de marcas de moda, belleza y estilo de vida.
En 2016, Jacenko fue arrestada y condenada a prisión por manipulación de acciones. Pasó seis meses en la cárcel antes de ser puesta en libertad condicional. Desde entonces, ha hablado abiertamente sobre su experiencia y ha usado su plataforma para abogar por una reforma del sistema carcelario.
Además de su trabajo en Sweaty Betty, Jacenko ha publicado varios libros, incluyendo su autobiografía, "Roxy's Little Black Book", y una serie de novelas de ficción. También ha aparecido en varios reality shows australianos, incluyendo "The Celebrity Apprentice" y "I'm a Celebrity... Get Me Out of Here!".
Jacenko ha sido objeto de controversia en varias ocasiones debido a su estilo de vida ostentoso y su tendencia a publicar fotos en las redes sociales mostrando su riqueza. También ha sido criticada por su gestión de la reputación de clientes polémicos, como el jinete de carreras y estafador condenado Oliver Curtis. Sin embargo, sigue siendo una figura influyente en el mundo de las relaciones públicas y la moda en Australia.
Oliver Curtis y Roxy Jacenko son una pareja australiana que ha enfrentado numerosas pruebas y desafíos a lo largo de su relación. Oliver es un inversor y ex banquero que ha sido objeto de numerosas controversias por su papel en una estafa de acciones de $ 1,4 millones en 2008.
Por otro lado, Roxy es una figura pública y empresaria exitosa que ha creado un imperio de relaciones públicas en Australia. Ella es conocida por su personalidad fuerte y su controvertido estilo de vida.
La relación entre Oliver y Roxy comenzó en 2011, poco después de que Oliver fuera condenado por su papel en la estafa de acciones. La pareja ha enfrentado muchas dificultades a lo largo de su relación, incluida la separación de Oliver de su familia y amigos como resultado de su condena.
En 2016, Roxy enfrentó su propio escándalo público después de ser sentenciada a ocho meses de prisión por cargos de manipulación de acciones. Durante su tiempo en prisión, Oliver mantuvo a su familia unida y cuidó de sus dos hijos.
A pesar de las adversidades, la pareja ha logrado mantener su relación fuerte y unida a lo largo de los años. En 2012, se casaron en una lujosa ceremonia y en 2013, dieron la bienvenida a su primer hijo, Hunter. En 2017, la pareja anunció que estaban esperando otro hijo y en junio de ese año, Roxy dio a luz a su segunda hija, Pixie.
En resumen, la relación de Oliver Curtis y Roxy Jacenko ha enfrentado muchas pruebas y desafíos a lo largo de los años, pero han logrado mantener su amor y compromiso el uno con el otro.