Stateira II fue la esposa del rey persa Darío III y la hija del rey Artajerjes III de Persia. Fue capturada junto con su esposo durante la batalla de Issos en el año 333 a.C. por Alejandro Magno, quien se enamoró de ella. Después de la muerte de Darío III, Alejandro la tomó como su esposa principal y la trató con respeto y afecto. Cuando regresó a Persia, Alejandro la proclamó reina y le concedió el título de "Reina de Reyes". Stateira II murió poco después en el parto, y Alejandro la honró con un espléndido funeral. Su hija, también llamada Stateira, y su hermana, Drypetis, se convirtieron en esposas de Alejandro después de su muerte.
Alexander el Grande y Stateira II fueron dos personajes históricos que estuvieron relacionados de manera romántica.
Stateira II fue la hija del rey persa Darío III y se convirtió en la reina de Persia después de que su padre fuera derrotado por las fuerzas de Alexander en la batalla de Gaugamela en 331 a.C.
Después de su victoria, Alexander se sintió atraído por Stateira y decidió casarse con ella para fortalecer su relación con el pueblo persa. Sin embargo, hubo algunos obstáculos para su matrimonio debido a las diferencias culturales y religiosas entre los griegos y los persas.
Finalmente, Alexander y Stateira se casaron en una ceremonia que combinaba las tradiciones griegas y persas, y tuvieron dos hijas juntos. Stateira también ayudó a Alexander a establecer relaciones más amistosas con los persas y fue fundamental en la reconstrucción del Imperio Persa después de las guerras.
Su relación terminó trágicamente cuando Alexander murió en el 323 a.C. y Stateira y sus hijas fueron asesinadas por los generales de Alexander poco después de su muerte.
A pesar de su corta vida juntos, la relación de Alexander y Stateira contribuyó en gran medida a la unificación de Grecia y Persia y a la creación de un nuevo imperio donde se respetaban las tradiciones y culturas de ambos pueblos.