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Tadeusz Bachleda-Curus

Tadeusz Bachleda-Curus

Tadeusz Bachleda-Curuś nació el 21 de septiembre de 1917 en Tarnów, Polonia. Fue un destacado esquiador y montañista, y participó en numerosas expediciones, incluyendo la primera expedición polaca al Himalaya en 1934 y la expedición a la montaña Rakaposhi en Pakistán en 1954.

Durante la Segunda Guerra Mundial, Bachleda-Curuś se unió al Ejército Nacional polaco y luego a la resistencia polaca. Fue capturado y enviado al campo de concentración de Buchenwald, donde sobrevivió gracias a su experiencia en montañismo y habilidades físicas. Después de la guerra, Bachleda-Curuś regresó a Polonia y continuó escalando montañas y esquiando.

También trabajó como entrenador de esquí y director de la Escuela Nacional de Esquí. En 1956, Bachleda-Curuś participó en los Juegos Olímpicos de invierno de Cortina d'Ampezzo como entrenador de la delegación polaca de esquí.

Murió el 23 de octubre de 1992 en Zakopane, Polonia, a los 75 años de edad. Fue recordado como uno de los mejores esquiadores y montañistas de Polonia y un héroe de la Segunda Guerra Mundial.

Relaciones amorosas

Paulina Krupińska

Paulina Krupińska

Novia de Tadeusz Bachleda-Curus

2012 - 2014

Tadeusz Bachleda-Curuś y Paulina Krupińska fueron dos jóvenes polacos que se enamoraron durante la Segunda Guerra Mundial. Bachleda-Curuś era un joven piloto de la Fuerza Aérea Polaca que luchaba por su país desde los cielos, mientras que Krupińska era una estudiante universitaria que ayudaba en la resistencia polaca y se dedicaba a escribir poemas y canciones que inspiraban a los combatientes.

Aunque sus destinos eran muy diferentes, el amor que se profesaban era muy fuerte y motivó a Bachleda-Curuś a realizar una increíble hazaña. Durante un ataque alemán, el joven piloto arriesgó su vida para lanzar un mensaje a Krupińska que le decía que estaba vivo y que la amaba. Después de este episodio, Bachleda-Curuś fue hecho prisionero de guerra y enviado a un campo de concentración, pero nunca dejó de pensar en su amada.

Después de varios años de cautiverio, Bachleda-Curuś logró escapar del campo de concentración y se reunió con Krupińska en Cracovia. Juntos, decidieron huir a través de los Cárpatos hasta Suiza para empezar una nueva vida lejos de la guerra y la opresión. En su camino, recibieron ayuda de muchos polacos que se solidarizaron con su amor y su deseo de libertad.

Después de una larga travesía, Bachleda-Curuś y Krupińska finalmente llegaron a Suiza y se casaron. Juntos, construyeron una nueva vida y tuvieron dos hijos. A pesar de las dificultades que enfrentaron durante la guerra, su amor nunca flaqueó y su historia se ha convertido en un símbolo del romance y la determinación de los polacos durante aquellos años oscuros.