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Tamara Tchinarova

Tamara Tchinarova

Tamara Tchinarova fue una bailarina, actriz y escritora nacida en Rusia en 1919. Comenzó su carrera como bailarina a los 14 años y se unió al famoso Ballet Ruso de Monte Carlo en 1938. Durante su tiempo en el Ballet Ruso, tuvo la oportunidad de trabajar con coreógrafos como George Balanchine y Léonide Massine.

En 1941, Tchinarova se casó con el fundador del Ballet Ruso, el coreógrafo y bailarín británico Anton Dolin. Juntos, trabajaron en el Ballet de la Ópera de París antes de fundar su propio grupo, el Ballet Concert. También realizaron giras por todo el mundo, incluyendo Estados Unidos, Australia y Sudáfrica.

Tchinarova también incursionó en el cine, actuando en películas como "Los Tres Mosqueteros" (1948) y "El Príncipe y la Bailarina" (1957), junto a Marilyn Monroe y Laurence Olivier.

Después de retirarse de su carrera de bailarina, Tchinarova se dedicó a la escritura. Escribió "Dancing into the Unknown: My Life in the Ballets Russes and Beyond" en 2007, donde cuenta sus experiencias en el mundo de la danza. También realizó conferencias y actuó como jurado para competiciones de ballet.

Tchinarova falleció en 2017 a los 98 años en Australia, donde había vivido desde la década de 1960.

Relaciones amorosas

Peter Finch

Peter Finch

Esposo de Tamara Tchinarova

1942 - 1959

Peter Finch y Tamara Tchinarova se conocieron en 1949 en el set de la película "The Story of Robin Hood and His Merrie Men". Finch acababa de terminar su primer matrimonio y Tchinarova era una bailarina de origen ruso que estaba en Londres presentándose en un espectáculo. La atracción fue mutua y comenzaron a salir.

En 1951, Finch y Tchinarova se casaron en una ceremonia en Londres. Tuvieron una hija llamada Anita, nacida en 1956.

La relación entre Finch y Tchinarova no fue fácil. A principios de los años 60, Finch comenzó a tener problemas de salud mental y se volvió cada vez más errático e impredecible. También tuvo problemas financieros y se endeudó profundamente. En 1965, Tchinarova decidió separarse de él y se mudó a Francia con su hija.

Finch se casó dos veces más después de su separación de Tchinarova, pero nunca volvió a tener una relación tan importante como la que tuvo con ella. Tchinarova, por su parte, se dedicó a su carrera de bailarina y en 1976 se convirtió en profesora de ballet en París.

A pesar de las dificultades, Finch y Tchinarova siempre mantuvieron una relación cordial. Finch incluso le dejó una buena parte de su patrimonio a Tchinarova y a su hija en su testamento cuando murió en 1977.

En resumen, Peter Finch y Tamara Tchinarova tuvieron una relación apasionada y tumultuosa que duró más de una década. Aunque se separaron en circunstancias difíciles, siempre mantuvieron un respeto mutuo y una relación amistosa.