Tessa Denham había pasado gran parte de su vida trabajando en una oficina de abogados, pero nunca sintió pasión por su trabajo. Después de muchos años de monotonía, decidió dar un giro radical a su vida y poner en práctica su verdadera pasión: la escritura. Sin experiencia previa, comenzó a escribir un blog personal donde compartía sus pensamientos, opiniones y experiencias de vida.
Pronto descubrió que la escritura no solo era una forma de expresión, sino que también podía ser una forma de generar ingresos. Comenzó a ofrecer servicios de redacción y edición a pequeñas empresas y emprendedores. Pronto, su pequeño negocio de escritura se convirtió en su fuente principal de ingresos, permitiéndole dejar su trabajo en la oficina y convertirse en su propia jefa.
En su tiempo libre, Tessa también se dedicaba a la fotografía, una afición que había descubierto durante sus viajes por el mundo. A menudo publicaba sus fotos en su blog, pero también comenzó a exponer en pequeñas galerías locales, ganando un seguimiento de admiradores de la fotografía.
Tessa aprendió valiosas lecciones a lo largo del camino, incluyendo la importancia de seguir sus verdaderas pasiones y de ser fiel a sí misma. Se dio cuenta de que nunca es demasiado tarde para cambiar de rumbo y seguir sus sueños.
Justin-Brescia y Tessa-Denham se conocieron en un concierto de música en Nueva York. Justin, quien es conocido como el estilista de celebridades en Hollywood, estaba en la ciudad para un trabajo y decidió salir a disfrutar de la música. Mientras estaba en el concierto, Justin notó a Tessa en la multitud. Tessa era una mujer hermosa y talentosa que tocaba la guitarra en la banda que se presentaba esa noche.
Después del concierto, Justin se acercó a Tessa y le felicitó por su increíble actuación en el escenario. Tessa se sorprendió al ver que Justin era uno de los estilistas más importantes de Hollywood y estaba encantada de hablar con él. Los dos continuaron hablando durante horas y descubrieron que compartían muchos intereses en común, como la música y el arte.
Después de esa noche, Justin y Tessa siguieron hablando y se hicieron amigos cercanos. Con el tiempo, su amistad se convirtió en algo más y comenzaron una relación romántica. Hasta el día de hoy, siguen disfrutando de la música juntos y apoyándose mutuamente en sus carreras profesionales.