Timothy Cox

Timothy Cox era un hombre que siempre había llevado una vida discreta y ordenada. Desde joven mostró un gran interés por la lectura y la música, dos aficiones que había sabido mantener a lo largo de los años y que eran para él una fuente inagotable de inspiración y consuelo. Era un hombre solitario por naturaleza, pero no por eso menos sociable: le gustaba charlar con la gente, conocer sus historias y compartir con ellos sus propias inquietudes. Durante muchos años trabajó como informático en una gran empresa, pero nunca se sintió del todo realizado en ese trabajo. Fue entonces cuando decidió dar un giro a su vida y dedicarse a lo que realmente le apasionaba: la escritura. Desde entonces ha publicado varios libros de relatos y novelas, que han sido muy bien recibidos por la crítica y que le han permitido viajar por todo el mundo para dar charlas y conferencias. Timothy Cox es un hombre tranquilo, reflexivo y muy observador, que sigue disfrutando de las pequeñas cosas de la vida y que no pierde nunca su capacidad de asombro.