Tiziana Wakengiri era una mujer curiosa y aventurera. Había dedicado gran parte de su vida a viajar por el mundo, descubriendo nuevas culturas y aprendiendo idiomas. También tenía una gran pasión por el arte y la literatura, lo que la llevó a convertirse en una importante coleccionista de obras de arte y en una prolífica escritora. A pesar de su exitosa carrera como escritora y coleccionista de arte, Tiziana nunca perdió su humildad y su compromiso con los demás. Siempre estaba dispuesta a ayudar a aquellos que lo necesitaban, especialmente a los niños de su comunidad. Incluso había fundado una organización benéfica para ayudar a los jóvenes a desarrollar sus talentos artísticos. A pesar de su dedicación y éxito en su carrera y en su vida benéfica, Tiziana siempre mantenía una actitud juguetona y un sentido del humor. A menudo sorprendía a sus amigos y familiares con bromas ingeniosas y aventuras espontáneas. Siempre decía que la vida era demasiado corta para tomarse en serio todo el tiempo. En resumen, Tiziana Wakengiri era una mujer inspiradora, curiosa y divertida que dejaba una huella duradera en todos aquellos que la conocían.